Rosa de Jericó: un amuleto para bendecir hogares y negocios

La Rosa de Jericó (Anastatica hierochuntica) es un preciado amuleto que se utiliza para bendecir los hogares, atrayendo la paz, el poder y la abundancia y ahuyentando las malas influencias. La Rosa de Jericó confiere suerte en los negocios, destreza en el trabajo, salud, fuerza, felicidad; y, sobre todo, atrae la energía positiva. La planta de la Rosa de Jericó no suele alcanzar los 15 centímetros de altura. Sus pequeñas flores son de color blanco. Cuando la planta ha florecido, las hojas caen y las ramas se contraen curvándose hacia el centro hasta adquirir una forma redondeada. En este momento el viento del desierto arranca las Rosas de Jericó del suelo y las arrastra convirtiéndolas en eternas viajeras que se desplazan por estepas y desiertos de otros países sin respetar fronteras. La Rosa de Jericó puede permanecer cerrada y seca durante muchos años hasta que la humedad o el contacto con el agua vuelva a abrirla, haciendo que recobre su frescura y belleza. Es entonces cuando extiende de nuevo sus ramas, abre los frutos y dispersa sus semillas como si volviese a nacer. Por eso también se la conoce como “planta de la resurrección”.

Creencias alrededor de la Rosa de Jericó

Se dice que durante el segundo milenio antes de Cristo, los comerciantes y hacendados de Jericó traían la planta desde otros lugares lejanos y la usaban como amuleto para bendecir sus casas y negocios. Era la época de máximo esplendor de la ciudad y la planta adquirió cada vez más fama hasta llegar a adoptar el nombre de Rosa de Jericó. También cuenta la leyenda que, cuando Jesús re retiraba a orar al desierto, la Rosa de Jericó se detenía una y otra vez a sus pies arrastrada por los vientos. Al despertar el día, la planta se abría con la humedad del rocío y ofrecía al Mesías las gotas de agua posadas en sus ramas. Jesús calmaba sus sed tomando estas gotas de agua con los dedos. Agradecido, el Maestro acabó bendiciendo la Rosa de Jericó. Esta leyenda se extendió por todos los continentes y la planta pronto llegó a ser considerada como una flor divina. [caption id='attachment_860' align='alignnone' width='440'] La Rosa de Jericó puede estar cerrada y seca durante años, hasta que la humedad vuelva a abrirla.[/caption]

Oración a la Santa Rosa de Jericó

Existe la siguiente oración dirigida a esta planta: Divina Rosa de Jericó: Por la Bendición que de Nuestro Señor Jesucristo recibiste, por la virtud que tú encierras y por el poder concedido, ayúdame a vencer las dificultades de la vida, dame salud, fuerza, felicidad, tranquilidad y paz en mi hogar, suerte en mis negocios, habilidad en el trabajo para ganar más dinero con que cubrir mis necesidades y las de mi hogar y toda mi familia. Divina Rosa de Jericó: Todo esto te lo pido por la virtud que tú encierras, en amor a Cristo Jesús y su grandiosa misericordia. Amén. Al término de la oración, deben rezarse tres Padre Nuestros.

Instrucciones para convertir la Rosa de Jericó en amuleto

La Rosa de Jericó debe ponerse en un plato hondo con agua, a las 9:00 o las 15:00 horas de un martes o un viernes. Hay que dejarla en el agua durante tres días seguidos, sacándola del recipiente a la misma hora que se puso y pronunciando las oraciones con Fe. El agua que queda en el plato se usa para rociar las esquinas de la puerta de la casa, por la parte de fuera. Así se ahuyentan las malas influencias y se atrae la Paz, el Poder y la Abundancia. En función de nuestras necesidades, el ritual variará.

• Para conseguir más dinero. Hay que poner la Rosa de Jericó en un recipiente grande cubierta de agua casi en su totalidad. En el recipiente, se deben poner cinco monedas de curso legal de cualquier país, preferiblemente de color amarillo (oro o cobre). La oración hay que hacerla a diario, de acuerdo con las necesidades.

• Para eliminar tensiones y envidias. Se pone la Rosa de Jericó en un plato hondo con agua, cubriendo totalmente las raíces y dejando al descubierto las hojas. Lo ideal es hacerlo un martes o un viernes, ya sea a las 9:00 o a las 15:00 horas. Se deja la planta tres días seguidos (hay que rezar la oración cada día) y se quita a la misma hora que se puso. Después se deja secar la flor de nuevo. Con el agua del plato se rocían las esquinas de la puerta del hogar y se chisporrotea por los balcones al aire, al mismo tiempo que se pronuncia el deseo de Paz y Amor. La operación ha de repetirse siete semanas consecutivas.

• Para conseguir trabajo o cualquier otro objetivo. Hay que introducir la Rosa de Jericó en un recipiente grande hasta que quede cubierta de agua. Después se debe escribir el deseo en un papel (pergamino, plástico, vegetal, etc.) y en lápiz o tinta imborrable. El papel se enrolla con un pequeño hierro o piedra imán y este paquetito se ata a las raíces de la planta, siempre en luna nueva o creciente, dejándolo hasta la luna llena. La oración debe realizarse durante seis días, añadiendo la petición concreta con Fe. Si la petición es de salud, hay que empezar en lunes; si es de trabajo, en martes; si es para los exámenes o viajes, en miércoles; si es de negocios o firma de documentos, en jueves; si es de amor, en viernes; si es para embarazos, partos felices o reconciliaciones, en sábado; y en domingo, si es para temas de suerte, bienestar y armonía.

• Para la Paz y la Felicidad en la casa. Se pone la Rosa de Jericó en un recipiente de agua y se cubre toda ella. Se deja en un recipiente, en un rincón de la sala o habitación, y se va añadiendo agua cuando falta o se cambia si se vuelve turbia. Se pronuncia la oración una vez al día.

¡Esperamos que con la Rosa de Jericó se hagan realidad vuestros sueños en estas Navidades! Foto: Jalisco.quebarato.com.mx